Nuestro Niño de Uvas y Espigas.

Ayer celebramos la fiesta del Niño de Atocha, también conocido como Niño Precioso y Niño de Uvas y Espigas.  

Los días anteriores los voluntarios y los niños fueron preparando la festividad y realizando los trabajos que después expondríamos para nuestras familias.

Ayer vimos nuestro centro lleno de personas que habían acudido a nuestra convocatoria: familiares, amigos y voluntarios. Solo eso ya nos lleno de alegría.

El acto comenzó con un sencillo y entrañable mensaje de nuestra directora María del Carmen Cumplido. 

En él puso de manifiesto el valor de esa imagen y su riquísimo simbolismo para las Hijas de la Natividad de María y para todos aquellos que la conocen.

En su explicación aludió a la posición de las manos y los pies descalzos, al simbolismo eucarístico de las uvas y espigas, a su corazón en llamas...

Para completar la descripción de ese Niño Precioso vimos el vídeo que os dejamos aquí.

A continuación, se proyectó un mensaje, tomado del Proyecto del Centro "Natividad de María" de Valdepeñas que manifiesta que nuestro Niño de Uvas y Espigas "representa a todos los niños  y niñas y a los valores que deseamos transmitirles para que sean buenas personas y contribuyan a crear un mundo mejor".

Finalmente, todos tomamos una pequeña merienda, los niños en su comedor habitual y los adultos que podían tomarla en el salón de la entrada. Hemos de dejar constancia que los familiares musulmanes que nos acompañaron -con toda la atención y el respeto que les hace acreedores de nuestra mayor consideración- como están en el Ramadán, se excusaron por no participar de la merienda.

Fue una celebración sencilla en la que convivimos, compartimos, aprendimos y mostramos un mutuo respeto y comprensión hacia nuestras propias creencias y simbolismos.